28 ago 2007

Abdulá Gül: nuevo Presidente Turco


"Seré el presidente de todos los turcos sin distinción durante todo el tiempo que permanezca en la jefatura del Estado", dijo Abdulá Gül en un breve discurso tras jurar su cargo.
Hace unos meses, en la primavera pasada se presentó como candidato a la presidencia de Turquía. Su candidatura desató una grave crisis institucional que obligó al Gobierno a convocar elecciones anticipadas y a cientos de miles de turcos a manifestarse a favor de la laicidad del Estado.
Diplomático experimentado, claro defensor de la democratización de Turquía y ferviente creyente, Abdulá Gül declaró en su toma de posesión que el secularismo debe también "garantizar la libertad de religión y de conciencia".
Evidentemente, el mensaje iba sobre todo dirigido al jefe del Estado Mayor turco, el general Yasar Büyükanit, que el lunes emitió un comunicado en el que afirmaba que los militares están decididos a detener "los sinuosos planes destinados a socavar los logros de la República y destruir su estructura secular y democrática".
Büyükanit y otros mandos de la cúpula militar no acudieron, como es habitual, a la toma de posesión del jefe de Estado. La principal fuerza opositora, el Partido Popular Republicano, también boicoteó la ceremonia.
Descontento del Ejército
"Ningún país puede considerarse contemporáneo si discrimina a uno solo de sus ciudadanos", dijo Gül para acallar el ruido de sables en los cuarteles y los gritos de centenares de laicos que se manifestaron frente al palacio presidencial para protestar contra su elección.
Para las Fuerzas Armadas y los sectores laicos más radicales, la llegada a Çancaya -el palacio presidencial- de uno de los principales impulsores del islamismo político representa una traición a los principios seculares sobre los que Mustafá Kemal, Atatürk, fundó la República turca sobre las cenizas del Imperio Otomano, en 1923. Estos sectores consideran que Gül, como Erdogan, esconde una agenda islamista.
Como presidente de Turquía durante los próximos siete años, Gül será también el comandante en jefe de las Fuerzas Armadas y, según los poderes que le otorga la Constitución, tendrá capacidad para realizar nombramientos institucionales y poder de veto sobre numerosas decisiones parlamentarias.
Gül salió elegido en la tercera vuelta. En las dos primeras se exigía el voto de dos tercios del Parlamento, mientras que en la tercera bastaba la mayoría absoluta de la Cámara, es decir, 276 votos, que superó ampliamente.
Para el gobernante de AKP la elección de Gül ha sido una clamorosa victoria.
El presidente saliente, Ahmet Necdet Sezer, vetó en mayo la reforma constitucional impulsada por el Gobierno islamista para elegir por sufragio universal al jefe del Estado. Era uno de los principales cambios democráticos que debía sufrir la actual Constitución, nacida dos años después del golpe de Estado de 1980. La reforma había sido aprobada por más de dos tercios del Legislativo, pero Sezer, un antiguo magistrado perteneciente al sector laico, la rechazó porque, dijo, la elección del presidente por sufragio universal podría alterar el equilibrio de poderes en Turquía.
Gül representa como pocos el avance del islamismo democrático en un país en el que tres de cada cuatro ciudadanos apoyan la presencia de islamistas en el Gobierno. Nacido en el feudo islamista de Kayseri, en el centro del país, Abdulá Gül, un economista que amplió estudios en el Reino Unido, trabajó entre 1983 y 1991 en Arabia Saudí, en el Banco de Desarrollo Islámico. Allí le fichó Necmettin Erbakan, el patriarca del islamismo político turco. Gül se unió entonces a las filas del Partido del Bienestar, y desde ese año fue elegido diputado en cuatro ocasiones.
Saltó al Gobierno en 1995, cuando fue nombrado portavoz del primer Gobierno islamista de coalición. Pero el poder de los militares y de los jueces en un país con poca tradición democrática logró pronto la ilegalización de ese partido. De su desintegración nació el Partido de la Virtud, también islamista, y fue en esta formación precisamente cuando Gül avanzó más en sus posiciones democráticas. Se convirtió entonces en la cabeza de una tendencia reformista más apegada a las realidades y la problemática del ciudadano de a pie. Centró su política en el fortalecimiento de los valores democráticos y el respeto a los derechos humanos, de manera que su plataforma fue considerada de carácter socialdemócrata dentro del amplio paraguas islamista.
Con Erdogan, un liberal en el terreno económico, Gül, la cara amable del Gobierno, siempre sonriente y de talante afable, dejó claro que su prioridad en la política exterior era la entrada de Turquía en la UE.
Un 'pañuelo' en la presidencia
Sin duda, el cambio más visible de la nueva presidencia de Turquía es el pañuelo de la primera dama. Todo un símbolo en un país que prohíbe acudir a la universidad o ser funcionaria pública a quienes se cubren la cabeza. "Mi madre no irá al Parlamento", declaró ayer Mehmet Emre, uno de los hijos del presidente a la agencia de noticias Anatolia. Con estas palabras dio a entender ayer que no habría confrontación con los sectores laicos más radicales.
No hay una norma escrita, pero hasta ahora ninguna mujer acudía a las recepciones oficiales cubierta. ¿Abrirá Hayrünnisa la veda en una sociedad que se confiesa creyente en un 99%?
El premio Nobel de Literatura turco Orhan Pamuk aborda en Nieve el dilema de numerosas jóvenes que se debaten entre los preceptos de su devoción y sus ansias de conocimiento y de mejorar con su educación universitaria el futuro de Turquía.
Una encuesta del diario turco Milliyet revela que el 72,6% de los participantes consideran "normal" que la esposa del presidente lleve pañuelo. Mientras que el 19,8% afirma que le produce incomodidad.
El sondeo es un reflejo de la profunda división de la sociedad turca, en la que el sector laicista minoritario se aparta cada día más de la realidad de la mayoría de la población, que se siente más representada dentro del islamismo moderado que actualmente gobierna el país.
Hayrünnisa no será la única en Çancaya -el palacio presidencial- que lleve pañuelo. Su hija también lo luce. Pero para que nadie diga que boicotean la política europeísta del nuevo presidente, madre e hija, al igual que Emine, la esposa del primer ministro, Recep Tayyip Erdogan, gustan de cubrirse la cabeza con fulares de los más famosos diseñadores europeos, desde Dior a Hermés, según critican las revistas femeninas turcas.
Hayrünnisa defiende, y su marido la apoya, que llevar pañuelo sea una cuestión de libertad y devoción religiosa.
Fuente: El País, y agencias.


EDITORIAL: La anomalía turca
El País, 29/08/2007;
Turquía tiene desde ayer por vez primera en los 84 años de la República de Atatürk un presidente con pasado islamista y una primera dama que lleva el hiyab. A la tercera vuelta, con una holgada mayoría, el Parlamento turco eligió a Abdulá Gül, hasta ahora ministro de Asuntos Exteriores y gran dinamizador de las negociaciones para el ingreso en la Unión Europea. De nada han servido las barreras levantadas por los militares y los laicistas para intentar cortarle el paso, que condujeron a las elecciones anticipadas en julio que ganó ampliamente el carismático primer ministro, Recep Tayyip Erdogan, y su Partido de la Justicia y el Desarrollo (AKP). Erdogan, con el aval de las urnas, decidió seguir apostando por Gül para reforzar la autoridad civil de la democracia turca.
Resultan intolerables las amenazantes advertencias públicas de los representantes de las Fuerzas Armadas turcas, que se consideran garantes del laicismo y de una democracia contra la que ha dado cuatro golpes de Estado desde 1960. Pero aunque aún constituyen un Estado dentro del Estado, los militares turcos han perdido una parte de su poder político con las reformas, aún insuficientes, para ingresar en la UE. No es casualidad que ahora sea el AKP el más ferviente partidario del ingreso en el club europeo.
Ese poder de los militares es la verdadera anomalía de Turquía, y no que un antiguo islamista llegue a la presidencia. Todo ello refleja la realidad social de un país poco preocupado, según los sondeos, por el pañuelo de la mujer del presidente, quien, sin embargo, no pudo, precisamente por su hiyab, estar presente ni en el Parlamento ni en el traspaso de poderes en el palacio de Cankaya, donde residirá. En ningún otro país europeo está prohibido a las mujeres llevar el velo en lugares oficiales, sea el Parlamento o la Universidad, aunque sea una disposición que avaló el Tribunal de Estrasburgo en el caso de una diputada turca.
Gül y Erdogan transitarán por un sendero estrecho, pero algo cambiará en Turquía. La presidencia de la República es algo más que un cargo honorífico. Dispone de resortes reales de poder, desde la firma o veto de leyes al nombramiento de jueces (incluidos los del Constitucional), de rectores universitarios y de presidentes de algunas fundaciones influyentes. Los laicos pierden así un fusible para asegurar que el país preserva "el principio de la República secular" que ayer Gül se comprometió a respetar.
La nueva situación de Turquía se convierte en un gran desafío para Europa. La UE no le puede dar un portazo a sus anhelos de ingreso, que son tantos como de modernización. Incluso el presidente francés, Nicolas Sarkozy, ha matizado su oposición al ingreso en el club de los Veintisiete y ha dejado abierta la posibilidad de seguir abriendo nuevos capítulos en las negociaciones, siempre que no cierren la asociación privilegiada que él prefiere. La experiencia del ejercicio pleno del poder de unos islamistas moderados, que dicen aceptar las reglas constitucionales laicas, no sólo es crucial para Turquía, sino también para el conjunto del mundo musulmán y para Europa

Muere el cardenal Gagnon

Dolor del Papa por la muerte del cardenal canadiense Édouard Gagnon
Benedicto XVI ha expresado su dolor al recibir la noticia del fallecimiento del cardenal canadiense Édouard Gagnon, P.S.S., a los 89 años, acaecida en la noche entre el domingo y el lunes en Montreal.
El purpurado era presidente emérito del Consejo Pontificio para la Familia y del Comité para los Congresos Eucarísticos.
Falleció en la casa provincial de los Padres de San Sulpicio, instituto religioso al que pertenecía desde hace unos 70 años.

Elecciones en Guatemala


Proceso electoral violento en Guatemala.
La misión de observación electoral de la Organización de Estados Americanos (OEA) en Guatemala pidió a las autoridades guatemaltecas esclarecer los más de 40 asesinatos con supuestos móviles políticos, ocurridos en el país de mayo a la fecha, en el contexto del proceso electoral.
El ex canciller peruano Diego García Sayán, jefe de esa misión, dijo que las autoridades competentes deben "esclarecer estos deplorables sucesos", que han ensombrecido el proceso de elecciones "para avanzar en la construcción de un ambiente que garantice la seguridad ciudadana".

¿No hay informe de la Femospp?

Nota de Gustavo Castillo en La Jornada, 28/08/007;
· Ilocalizables, miles de documentos obtenidos del Archivo General de la Nación
· En la PGR “no existe” informe de la Femospp sobre actos de lesa humanidad
A ocho meses de que desapareciera oficialmente la Fiscalía Especial para Movimientos Sociales y Políticos del Pasado (Femospp), y a pesar del escándalo que se desató por la supuesta existencia de un informe histórico que daba cuenta de actos de lesa humanidad cometidos por militares y policías en México durante las décadas de los 60, 70 y 80, la Procuraduría General de la República (PGR) informó que ese material es “inexistente”.
En respuesta a una petición tramitada a través del Instituto Federal de Acceso a la Información Pública (IFAI), a la cual correspondió el folio 0001700136207, la PGR declaró “no contar con la información solicitada”.

El Juez Gonzales


El Juez Gonzales/
Una vez pasadas las elecciones de noviembre del 2004, la renuncia del Ex Procurador Ashcroft era de esperarse, el motivo problemas de salud. Ashcroft fue una de las figuras más controvertidas durante el gobierno de Bush, toda vez que fue el artífice y celoso guardián de la controvertida Ley Patriota aprobada por el Congreso casi por unanimidad al calor de los ataques terroristas del 11.S: la ley limitó las libertades civiles y autorizó a la policía a grabar conversaciones telefónicas, realizar detenciones preventivas y compartir informaciones de inteligencia sin supervisión de los tribunales. Obviamente para los grupos de derechos civiles y sobretodo latinos fue un paso atrás en la lucha por la protección de los derechos civiles e individuales.

Al Gonzales hasta luego


A 520 días por concluir la administración Bush, Alberto Gonzales, (Al para los amigos) presentó ayer su dimisión irrevocable.
Ha sido el primer hispano en llegar al cargo de Secretario de Justicia de los EE UU.
Al confirmar su decisión -que hará efectiva el próximo 17 de septiembre-, Gonzales se limitó a calificar sus trece años de servicio público como "una singladura excepcional".
Sin aceptar preguntas de los periodistas, el hombre se limitó a recalcar que incluso sus peores días como fiscal general de Estados Unidos han sido "mejores que los mejores días de mi padre", un humilde trabajador agrícola itinerante de origen mexicano.

Hoy es Jueves Santo, fin de la Cuaresma

Hoy es jueves Santo... Y aunque la semana Santa comienza el domingo de Ramos, el jueves es sagrado, grande, puro; es el día clave, que marca...