16 mar 2007

Juan José Tamayo y Jon Sobrino

Jon Sobrino: hacer teología desde las víctimas/Juan José Tamayo, director de la Cátedra de Teología y Ciencias de las Religiones Ignacio Ellacuría en la Universidad Carlos III de Madrid.
Publicado en EL CORREO DIGITAL, 16/03/2007);
La Congregación para la Doctrina de la Fe ha emitido una notificación sobre dos libros del teólogo hispano-salvadoreño Jon Sobrino ‘Jesucristo liberador’ y ‘La fe en Jesucristo. Ensayo sobre las víctimas’, en los que dice haber encontrado «diversas proposiciones erróneas o peligrosas que pueden causar daño a los fieles».
Me gustaría hacer una reflexión serena sobre uno de esos libros, ‘La fe en Jesucristo’, publicada en 1998, que considero una de las obras mayores de la cristología del siglo XX, al lado de ‘Jesucristo,’ de Karl Adam, ‘Ser cristiano’, de Hans Küng, ‘Jesús el Cristo’, de Walter Kasper, ‘Jesucristo y la liberación del hombre’, de Leonardo Boff, ‘El hombre de hoy ante Jesús de Nazaret’, de Juan Luis Segundo, ‘Jesús. La historia de un Viviente’, de Edward Schillebeeckx, y ‘Cristología feminista crítica’, de Elisabeth Schüsler Fiorenza, entre otras.
Según el filósofo Karl Jaspers, Jesús de Nazaret es una de las personalidades decisivas en la Historia de la Humanidad junto con Confucio, Buda y Sócrates. Aun habiendo nacido en el seno de la religión judía y siendo el iniciador del cristianismo, trasciende las diferentes tradiciones religiosas que pretenden apropiarse de él y rompe los moldes dogmáticos en que se le ha querido encerrar. Hasta el presente ha conseguido librarse de las sucesivas crisis que desde hace siglos viene sufriendo el cristianismo occidental por mor de la crítica moderna y posmoderna de la religión.
Jesús de Nazaret es objeto de estudio desde las más plurales disciplinas y desde las ópticas más dispares. La obra de Jon Sobrino se sitúa en el ámbito teológico, y más en concreto en la óptica de la teología latinoamericana de la liberación. Su perspectiva es doble: la realidad de la fe y la realidad de las víctimas, ambas estrechamente relacionadas. Sobrino no reduce la fe a una actitud religiosa intimista y recluida en el templo, sino que la amplia a la totalidad de la persona y a la totalidad de la realidad. La fe no se queda en la respuesta a la pregunta sobre si Jesús es divino o no, o si es humano o no; exige tomar postura a partir de él ante la realidad en sus diferentes dimensiones. En otras palabras, la fe en Jesucristo es más que fe en él; es una fe totalizante, que demanda a los cristianos y cristianas hacerse cargo de la realidad en clave de utopía y transformarla en el horizonte de los valores del reino de Dios. Tiene, por tanto, un componente ético, amén de religioso, ambos inseparables.
Ello quiere decir que el imaginario cristiano es capaz de plantear interrogantes significativos, de ofrecer respuestas que tienen que ver con lo humano y, en esa medida, puede ayudar a buscar alternativas humanizadoras para nuestro mundo tan deshumanizado. Se trata de una concepción global de la fe, inspirada directamente en Rahner e indirectamente en Zubiri, maestro de Ignacio Ellacuría, asesinado junto a otros seis jesuitas y dos mujeres salvadoreñas.
Especial relevancia tiene el lugar desde donde Sobrino hace su reflexión sobre Jesús de Nazaret: las víctimas. Como ya hiciera ver Habermas, no hay conocimiento sin interés. Tampoco conocimiento teológico. Esto lo sabe muy bien el teólogo hispano-salvadoreño, para quien la teología no es un saber socialmente neutro, ni históricamente desmemoriado, ni políticamente apartidario, ni éticamente indiferente, sino que responde a un ‘para qué’ y a un ‘para quién’, se ubica siempre en un determinado lugar y responde a un interés. El interés de la teología de la liberación es decididamente emancipatorio: la liberación de los pobres o, para expresarlo con categorías benjaminianas, la rehabilitación de las víctimas.
Nuestro mundo, afirma Sobrino, es un mundo de víctimas, de personas excluidas, que constituyen una nueva edición, aumentada y refinada, de Auschwitz. Si Auschwitz fue, hace más de sesenta años, la vergüenza de la Humanidad, hoy lo es la exclusión de miles de millones de seres humanos, la muerte de millones de personas indefensas que no tienen ningún tribunal al que recurrir para defender su inocencia y para denunciar a los culpables. Los excluidos constituyen el gran relato de nuestro tiempo. Sin embargo, sobre ellos se tiende un tupido velo de silencio, más aún, de encubrimiento, con la intención de negar su existencia, al tiempo que se generaliza una cultura de la indiferencia.
Sobrino rescata a las víctimas del olvido y de la indiferencia de que son objeto y las sitúa en el centro de su reflexión. Ellas no ofrecen, es verdad, una solución mecánica a la comprensión de los textos del Nuevo Testamento y de las declaraciones doctrinales posteriores sobre Jesús de Nazaret, pero sí plantean preguntas sobre su significado, desenmascaran las intenciones a veces regresivas de sus autores y expresan sospechas sobre sus intérpretes oficiales, que tienden a poner los textos al servicio de la institución eclesiástica, más que al servicio de los desheredados de la Tierra. La perspectiva de las víctimas ayuda a conocer a Jesús en clave de seguimiento de su causa, que es «el reino de Dios para los pobres», y a leer los documentos ‘revelados’ en clave liberadora. Aporta luz y utopía, acogida y perdón, al tiempo que esperanza para el presente de las víctimas, y no sólo para el futuro.
Ésta es la original y comprometida perspectiva que guía la reflexión de Sobrino en sus tres núcleos fundamentales. El primero es la resurrección de Cristo, cuyo centro de atención es el Dios de Jesús que hace justicia a las víctimas poniéndose de su lado. El segundo se refiere a los títulos atribuidos por el Nuevo Testamento a Jesús de Nazaret: mediador, mesías, señor, hijo de Dios, hijo del Hombre, Buena Noticia, etcétera, releídos desde América Latina a la luz de la esperanza de los empobrecidos. El tercero es el de los dogmas cristológicos en su dialéctica humanidad-divinidad, que Sobrino afirma en su totalidad con rigor terminológico, coherencia doctrinal y credibilidad histórica. No hay merma o vaciamiento de la divinidad a favor de la humanidad, como tampoco minusvaloración de ésta a favor de una divinidad desvinculada de la historia. La perspectiva de las víctimas ayuda a descubrir nuevas dimensiones humanizadoras del Dios de Jesús, aporta una concepción global de la salvación y contribuye a replantear el universalismo desde los excluidos, ausentes, a veces, en la teología dogmática católica.
La obra de Sobrino no cae en el mecanismo victimario, que con frecuencia ha caracterizado a la teología cristiana y a las prácticas ascéticas. Las víctimas no son condición necesaria para la reconciliación; constituyen, más bien, un obstáculo. La reconciliación no se logra recurriendo al sacrificio de las víctimas, sino a través de la práctica de la justicia y de la misericordia, en plena sintonía con el mensaje de los profetas de Israel y de Jesús de Nazaret: «Misericordia, no sacrificios». Este planteamiento responde a la concepción del filósofo de la Escuela de Frankfurt Max Horkheimer sobre la teología como «la esperanza de que la injusticia que caracteriza al mundo no pueda permanecer así, y lo injusto no pueda considerarse como la última palabra», y como expresión de un anhelo: «Que el asesino no pueda triunfar sobre la víctima inocente».
El libro de Jon Sobrino merece una lectura desde la solidaridad con las víctimas y no desde la rígida e inmisericorde ortodoxia, como la que ha hecho el Vaticano.

El profesor Wieviorka en La Vanguardia

  • El fenómeno Bayrou/Michel Wieviorka, profesor de la Escuela de Altos Estudios en Ciencias Sociales de París.
En LA VANGUARDIA, 16/03/2007);
La campaña electoral francesa produce, desde muchos puntos de vista, pasmo y estupor. Al principio, en otoño del 2006, todo parecía fijado de antemano. En efecto, se enfrentaban dos candidatos: Ségolène Royal a favor de la izquierda, Nicolas Sarkozy de la derecha. Ambos formaban una pareja que apasionaba a los cronistas de la prensa popular; ambos lograban transmitir a la sociedad determinadas promesas que representaban una ruptura con el sistema político precedente sin dejar de exponer ideas y posturas propias de la tendencia propia. En la derecha, Sarkozy ha conseguido imponerse paulatinamente, obteniendo apoyos y adhesiones antes no evidentes ni seguros. Y, en la izquierda, Royal ha logrado no sólo la investidura de su partido con un fuerte avance sobre sus dos rivales, Dominique Strauss-Kahn y Laurent Fabius, sino que además se ha revelado como la figura capaz de ahorrarle a su partido el desastre del 2002: algunos candidatos que se interpusieron en el 2002 en el camino de Lionel Jospin se le han unido en esta ocasión, evitando así el riesgo de una posible dispersión del voto del electorado de izquierdas en la primera vuelta. Un peligro menos que afrontar teniendo en cuenta que la “izquierda de la izquierda” - el Partido Comunista, los verdes, los trotskistas, los altermundistas- da claras muestras de su permanente situación de naufragio y exhibe cifras irrisorias de intención de voto en los sondeos; su electorado tradicional se apresta en líneas generales a depositar un voto útil y, en consecuencia, por la candidata en la primera vuelta.
Sin embargo, desde hace varias semanas, el panorama ha cambiado con el potente ascenso de François Bayrou: un ascenso tan sorprendente que los institutos de encuestas minimizan un tanto sus resultados sobre este candidato antes de publicarlos, tal es el grado de su sorpresa. En este momento, François Bayrou obtiene en las encuestas resultados comparables a los de Ségolène Royal; de hecho sube, en tanto ella baja; en cuanto a Sarkozy, también pierde fuelle.
¿Qué sucede, por tanto?
El factor básico estriba en el rechazo de los franceses del sistema político actual. Los estudios y análisis de un centro de investigación tan solvente como el Cevipof de París indican que dos de cada tres franceses desconfían de los partidos políticos que han permitido, a su juicio, que Francia se debilitara, que se ahondara el foso de la injusticia y la desigualdad social, que el sistema educativo y las instituciones públicas sufrieran una crisis, etcétera. Ahora bien, si por una parte en la derecha Sarkozy se ve claramente respaldado y secundado por su partido, en la izquierda el fenómeno es más complejo. Royal se encuentra en medio de una especie de contradicción que puede demostrarse en su caso una trampa mortal. Su éxito inicial, que le valió la investidura en el seno de un Partido Socialista preocupado ante todo por promover al candidato/ a con mayores posibilidades de éxito en los sondeos frente a Sarkozy, descansaba sobre la diferencia que Royal desplegaba - y representaba- con relación al aparato socialista clásico. En la primera fase de su campaña, pudo hacer ostentación si cabe de manera aún más cómoda de la distancia respecto de su propio partido con ocasión de mítines y encuentros públicos en cuyo curso se refería a una democracia participativa manifestando que aprendía enormemente en tales reuniones, dando a entender que no aprendía tanto en su relación con el aparato del partido y sus elefantes, sus principales líderes. Sin embargo, ha debido recurrir posteriormente al propio aparato del partido y a sus elefantes, quienes andan más bien escasos de entusiasmo e incluso sostienen un doble discurso: mientras le dan públicamente su apoyo, en privado expresan sus dudas. Y, sin llegar al extremo de movilizar de hecho al partido - ya bajo bastante tensión por obra y gracia de sigilosos enfrentamientos entre tendencias y líderes-, lo cierto es que se ha implicado a fondo de modo que la población experimente el sentimiento de que tiene delante una figura de actitud distinta que le toma efectivamente el pulso a la gente de a pie.En cuanto a Bayrou, él no tiene tales problemas: su partido es pequeño (sólo 30 diputados) y puede alardear de presentarse como líder político libre en relación con las lógicas propias del aparato. Es el hombre del centro, el que rechaza el viejo sistema, ya gastado, de la oposición entre izquierda y derecha. Capitaliza por tanto cómodamente en torno a su figura y su nombre el rechazo de los partidos políticos, la especialidad en su día del Frente Nacional. Pero con la diferencia de que lo hace en el centro y desde el centro y no en la extrema derecha, proponiendo un proyecto dotado de cualidades a las que son sensibles lo electores.
Este proyecto, en efecto, no es un programa ni un catálogo de medidas y, por tanto, de promesas: Bayrou propone más bien una visión y unas orientaciones generales. Y asocia al proyecto en cuestión un discurso pleno de prudencia y de oposición a un continuo endeudamiento del país - factor que aporta una imagen de rigor y seriedad- donde y cuando los otros candidatos parecen multiplicar promesas que no podrán mantener. Bayrou, por otra parte, ofrece la imagen de cierta serenidad y asimismo de una capacidad de atenta escucha, siendo así que Sarkozy transmite una imagen febril y Royal un tanto renuente a la hora de entrar al trapo en auténticos debates. Además, Bayrou es un hombre de provincias, un padre de familia numerosa (seis hijos), un católico comprometido con la laicidad. Bayrou conoce el medio rural pero también es catedrático de Lenguas Clásicas, escritor (autor de obras de historia, entre otras) aunque no enarca (de la prestigiosa ENA), si bien los franceses están en general bastante hartos ante la perspectiva de que quienes les dirigen hayan de ser todos expertos de la ENA, gente distante de las realidades de la vida diaria. El candidato en cuestión posee un rasgo de serenidad del que carecen sus adversarios; sucede, en efecto, que el país se siente agitado e inquieto, amenazado por la globalización en tanto diversos sondeos indican que los franceses juzgan crecientemente que sus hijos tendrán una vida más difícil que la suya.
Al comienzo de la campaña no daba la sensación de que pudiera haber mucho espacio político para François Bayrou. Sin embargo, de forma gradual, y en diversos segmentos de la población, el rechazo frente a los dos candidatos principales le beneficia incluso en su propio campo. En la izquierda, una parte creciente del electorado se siente decepcionada al ver que los elefantes vuelven a la pista en desorden: Fabius quiere ir todo a la izquierda, Strauss-Kahn mira hacia el centro hasta el punto de que se sospecha que quiera preparar una alianza con Bayrou. Y Jean-Pierre Chevènement - figura del traidor en el 2002, ya que sin su candidatura Lionel Jospin hubiera podido estar presente en la segunda vuelta-, tira hacia atrás al partido, y a Ségolène Royal, hacia posiciones en las que la idea de nación desempeña un papel central. Todo ello genera desorden y da fe de una crisis interna en el partido socialista. Al menos, se dice, una victoria de Bayrou dará pie a pensar que puede producir un aggiornamento y una salida de la crisis. Además, Bayrou presenta una ventaja: en los sondeos aparece como virtual vencedor frente a Sarkozy en caso de duelo en la segunda vuelta, lo que constituye un poderoso argumento, ya que en la izquierda, y en la izquierda de la izquierda, Sarkozy es rechazado con mucha mayor contundencia de lo que lo fue Chirac, sobre todo por su actitud ante la inmigración o los disturbios urbanos de octubre y noviembre del 2007. En la derecha, Sarkozy no tiene la unanimidad; algunos lo consideran figura inquietante, inestable, no suficientemente gaullista, demasiado atlantista o bien incluso le reprochan adular al electorado de extrema derecha; otros no aceptan su gestión sobre el islam en Francia, considerada comunitarista, o su apoyo al principio de la discriminación positiva. En los dos bandos principales, una parte de los electores se apresta a votar por Bayrou y ciertos electores del Frente Nacional parecen dispuestos a adoptar la misma actitud: Jean-Marie Le Pen es mayor, no tiene ninguna posibilidad de acceder al Elíseo y, puestos a protestar contra el sistema de partidos clásicos - se dicen-, tanto mejor hacerlo de manera realista.¿Será elegido François Bayrou? Es muy difícil afirmarlo: los sondeos indican que más del 40% de los electores están indecisos o dispuestos a modificar sus intenciones de voto. Además, François Bayrou tiene una debilidad importante: al no disponer de un partido fuerte no puede indicar con quién gobernará si resulta elegido y en qué parlamentarios se apoyará. Puesto que la elección presidencial será seguida un mes más tarde de elecciones legislativas que deben dibujar el contorno de la mayoría en el Parlamento, ¿podrá conseguirla? Es ahí donde reside la mayor incertidumbre de esta candidatura que, por el momento, va al alza y parece capaz de dar una sorpresa.

San Nicolás de Bari


La visita del presidente de la Federación Rusa, Vladimir Putin, a la ciudad italiana de Bari ha servido para que la iglesia rusa de esa ciudad regrese al Patriarcado ortodoxo de Moscú.
El Ayuntamiento de Bari accedió el 14 de marzo a la petición del presidente de entregar al Patriarcado en propiedad esta iglesia dedicada a San Nicolás, de Bari (Santa Clos, Niklaus). Putin había pedido ayuda al Vaticano para alcanzar este objetivo y, al encontrarse con el Papa, el 13 de marzo, le regaló un icono que representa precisamente a san Nicolás Taumaturgo (270-350).
El templo en Bari fue construido por la Iglesia ortodoxa rusa en 1913. Esta ciudad a través del segundo milenio ha sido meta de peregrinaciones para los ortodoxos rusos, que tienen una gran devoción por san Nicolás de Bari. La Iglesia fue comprada en circunstancias poco claras por el Ayuntamiento, en 1937.
Durante la visita de Putin a Bari, con motivo de una cumbre con el gobierno italiano, el presidente rezó ante los restos de San Nicolás (de Mira), en la basílica católica en que se encuentran custodiados, después que fueron retirados de Turquía luego de la invasión musulmana.

La droga modelo

Un texto de Peter Schwartz para la revista Foreign Policy (Edición Española, septiembre del 2005) señala que la guerra contra las drogas llegará pronto a su fin. No se ganará ni se perderá, y, desde luego, no se eliminará su consumo ilícito. La gente seguirá buscando su placer personal y sus adicciones incontrolables. No. El combate terminará, porque los estupefacientes que hoy conocemos como la cocaina, mariguana desaparecerán. La droga modelo del futuro es el cristal de metanfetamina, que está arrasando en EE UU y abriéndose paso en otros países como el nuestro.
El 5 de diciembre, a pocos días del inicio del gobierno del Presidente calderón, el Ministerio Público Federal aseguró en el Puerto de Lázaro Cárdenas, Michoacán, un cargamento de 19.7 toneladas de seudoefedrina.
El aseguramiento equivale a poco más de un tercio del total de importaciones legales de seudoefedrina para México; fue el mayor cargamento de seudoefedrina decomisado en la historia.
El cargamento provenía de China, y se dirigia hacia el Puerto de Long Beach, en California y posteriormente hacia Lázaro Cárdenas, Michoacán.
En 2003 la PGR –con el apoyo internacional-, dieron uno de los mayores golpes que se hayan causado a narcotraficantes de metanfetaminas; se aseguraron 4 millones 799 mil tabletas, -es decir, una tonelada 256 kilogramos- que contenía clorhidrato de tripolidine y clorhidrato de seudoefedrina.
En 2005 se aseguraron en México tres toneladas 488 kilos de metanfetaminas; 50 millones 494 mil 412 unidades de pastillas y siete toneladas 209 kilos 74 gramos de pseudoefedrina.
En el reciente informe dado a aconocer el 1 de marzo de 2006 en Viena, la Junta Internacional de Fiscalización de Estupefacientes (JIFE) dio la voz de alarma ante el rápido aumento de la fabricación ilícita de metanfetamina en el Mundo.
Señala que "además de aumentar pronunciadamente en América del Norte y el Asia sudoriental, la fabricación ilícita de metanfetamina se está extendiendo también a otras regiones como África, Europa oriental y Oceanía. Esa tendencia se ve atizada por la capacidad de los traficantes para desviar efedrina y seudoefedrina, los precursores básicos de la metanfetamina, de los canales de distribución lícitos. A raíz de la labor de vigilancia de casi 2,000 remesas de efedrina y seudoefedrina en el comercio internacional lícito en 2005, la Junta pudo detectar una serie de remesas sospechosas de ambas sustancias. Las remesas estaban destinadas a América del Norte y el Asia sudoriental, donde es sabido que tiene lugar la fabricación ilícita de metanfetamina, aunque también a países de África y América central y América del Sur. Entre los casos más importantes figuran la prevención de la desviación de 26 toneladas de seudoefedrina a la República Democrática del Congo y 7,3 toneladas a Kenya, de 19,5 toneladas de efedrina al Paraguay y de 3 toneladas de efedrina y 3 toneladas de seudoefedrina a Belice."
Empero "En América los traficantes están dirigiendo la atención a nuevas rutas de desviación y a preparados que contienen seudoefedrina como fuente de materia prima para la fabricación ilícita de metanfetamina." Las exportaciones de seudoefedrina a México se quintuplicaron entre 1998 y 2004. En 2005 se detectó una serie de envíos sospechosos de seudoefedrina a ese país. Como reacción, las autoridades mexicanas han prohibido a los intermediarios la importación de seudoefedrina y han reducido a la mitad las importaciones de la sustancia."

Duro golpe al crímen organizado


No puede haber un golpe certero a la delincuencia organizada sino se da donde más duele: el dinero.
Autoridades federales incautaron más de 200 millones de dólares en efectivo además de miles de euros y pesos mexicanos en una casa de una lujosa zona residencial de la ciudad de México.
La Procuraduría General de la República (PGR) señaló en un comunicado que fueron detenidas siete personas, y decomisados ocho vehículos de lujo, siete armas y maquinaria para fabricar tabletas de metanfetaminas.
Las autoridades aseguran que este es el mayor decomiso de dinero en efectivo realizado.
Además de los dólares, se incautaron 200,000 euros y 157,500 pesos que se encontraban guardados en alacenas y dentro de maletas.
Un juez dictó una orden de cateo a un inmueble en Las lomas de Chapultepec como parte de investigaciones a una empresa denominada "UNIMED PHARM CHEM DE MEXICO, S.A. de C.V.", que según la PGR importaba de la India de manera ilegal acetato de pseudoefedrina para usarlo en la elaboración de clorhidrato de pseudoefedrina pura, precursores que sirven para producir metanfetaminas.
La PGR refirió que estas investigaciones se derivan de un decomiso del 5 de diciembre de 19 toneladas 497 kilogramos de pseudoefedrina en el puerto de Lázaro Cárdenas, Michoacan.
Se decomisaron, según el comunicado de la autoridad:
2 mil 318 millones 193 mil pesos, es el total aproximado en efectivo de lo incautado, los cuales están distribuidos en:
— 205.6 millones de dólares (más de 2 mil 315 millones de pesos) — 200 mil euros (2 millones 980 mil pesos) — 157 mil pesos
8 vehículos de modelo reciente: — 1 coche Toyota — 1 camioneta Land Rover — 6 automóviles Mercedes Benz
7 armas de fuego: — 2 de ellas largas — 5 cortas
7 personas: — 1 mujer y 6 hombres; los
nombres de los presentados ante el Ministerio Público son: Raymundo Campos Erik, Tomoyi Mars Yu, Zhn Wei Yi, Arturo Rubio Valdez, Jiovani Delgado González, Alejandro Becerra Turral y Francisco Sertuche Vázquez.
Incluso se tuvo que contratar a un camión de mudanzas para transportar el dinero a las oficinas del Ministerio Público, 25 vehículos oficiales custodiaron el transporte; 50 elementos más de la Policía Federal Preventiva, fuertemente armados, reforzaron la seguridad en el inmueble.
Para tener una idea del decomiso en todos los operativos efectuados a lo largo de 2006 contra el narcotráfico, decomisó un total de 53 millones 325 mil dólares.
Aún hay más: Felipe Calderón
El Presidente Calderón, precisó hoy en Tijuana BC, donde esta de gira que el decomiso de dinero, efectuado ayer asciende en total a 250 millones de dólares, y precisó que es dinero usado por el narcotráfico, hecho que hasta anoche no se había precisado.
El titular del Ejecutivo dijo
"ayer, en una ciudad donde quizá no se hable mucho del crimen (orale), en la Ciudad de México, ayer mismo decomisamos en dinero en efectivo la mayor cantidad de dinero en efectivo derivado del narcotráfico, más de 250 millones de dólares en efectivo, que es el mayor decomiso no sólo de México, sino quizá del mundo."
Agrego "Empecemos por poner la casa en orden, de poco sirve combatir a la delincuencia si los criminales tejen sus redes también por adentro de nuestras corporaciones y de nuestras autoridades. A mí me consta que la mayoría de los policías trabajan con honestidad y con dignidad, que arriesgan la vida, que actúan con rectitud.Pero también y por desgracia, por algunos corruptos se ensombrece todo el esfuerzo, pagan justos por pecadores."
Seguramente habrá más....
En el anuncio sobre la puesta en marcha de la Operación Conjunta Michoacán, dada a conocer el lunes, 11 de Diciembre de 2006, lo que más me llamo la atención fueron las siguiente palabras del Procurador Genera de la República Eduardo Medina Mora, ya como de último:
"Quisiera señalar que con fecha 5 de diciembre y como parte de los trabajos preparatorios de este operativo, el Ministerio Público Federal aseguró en el Puerto de Lázaro Cárdenas, Michoacán, un cargamento de 19.7 toneladas de seudoefedrina que es el precursor químico utilizado para la metanfetamina.
Este aseguramiento equivale a un tercio, poco más de un tercio del total de importaciones legales de seudoefedrina por nuestro país en este año 2006, es el mayor cargamento de seudoefedrina decomisado en la historia. Este cargamento provenía de China, salió a en una embarcación de bandera británica de el Puerto de Dalianxingang, en China, dirigido hacia el Puerto de Long Beach, en California y posteriormente hacia Lázaro Cárdenas, Michoacán y venía declarado como una materia prima para otros usos, después de las pruebas que se realizaron en laboratorio en conjunto con la Administración General de Aduanas y la Policía Federal Preventiva es que se determina que el contenido real de este contenedor era seudoefedrina, como digo, el mayor cargamento decomisado en la historia de nuestro país..."
Y pues había que seguirle la pista al dinero.

Hoy es Jueves Santo, fin de la Cuaresma

Hoy es jueves Santo... Y aunque la semana Santa comienza el domingo de Ramos, el jueves es sagrado, grande, puro; es el día clave, que marca...